Qué es el lenguaje positivo
¿Qué es el lenguaje positivo? Descubre su poder

¿Sabes el poder y la fuerza que tienen las palabras que emites? Las palabras que salen de nosotros pueden elevar o hundir a quienes van dirigidas e, incluso, a nosotros mismos. De ahí la necesidad de que aprendamos a comunicar de manera asertiva y positiva. En este post te explicamos qué es el lenguaje positivo y los beneficios que puede aportar a nuestra vida.

Las palabras tienen un poder inmenso. Son capaces de tener un efecto inmediato en nuestro estado de ánimo. Incluso, pueden permanecer en el tiempo instalándose en nuestra mente y corazón.

La forma en que nos expresamos afecta directamente a cómo se recibe nuestro mensaje y al tipo de respuesta que es más probable que obtengamos según utilicemos un lenguaje positivo o no. En este sentido, el vocabulario que elijamos usar, combinado con nuestro tono y expresiones faciales, nos ayudará o dificultará el logro de nuestros objetivos de comunicación.

Lenguaje positivo y lenguaje negativo

En nuestra vida cotidiana, el lenguaje positivo creará una impresión mucho mejor en los demás y en nosotros mismos que el lenguaje negativo o incluso neutral. El lenguaje positivo nos eleva.

El filósofo e investigador Luis Castellanos nos muestra en este vídeo cómo las palabras forjan nuestra capacidad de ver el mundo y cómo las palabras positivas nos enseñan a ver el lado favorable de ese mundo:

Lenguaje negativo

Sin embargo, por lo general, tendemos a expresarnos usando un lenguaje negativo. Los “no puedo”, “no debo” y “no quiero” que tanto utilizamos moldean nuestro comportamiento y nuestra visión de la vida. Así como, la percepción que los demás tienen de nosotros.

Nos quejamos a diario y criticamos lo que nos molesta. Si hace frío, si llueve, si hace calor, si tenemos que hacer cola en el banco o en el supermercado, si tenemos mucho trabajo, si no nos gusta lo que comemos… Por otro lado, centramos toda nuestra energía en lo que nos aleja del bienestar porque esto que hacemos, hablar desde el lado negativo de las cosas, los sucesos, lo cotidiano, nos perturba de manera tenaz.

¿Qué hacemos?… Sencillamente focalizarnos en lo negativo. Sin darnos cuenta, nos hablamos y hablamos desde ahí, desde ese lado que no nos deja ver aquello de bueno que hay en nuestro día a día. De este modo, cambiar aquello que no nos gusta se hace más complicado y difícil.

beneficios-del-lenguaje-positivo

Lenguaje positivo

Recordemos que las palabras generan una imagen mental propicia o perjudicial para el logro de nuestro objetivo comunicativo. Por tanto, para transmitir mejor nuestro mensaje, el lenguaje positivo está orientado a los beneficios, los propios y los ajenos.

Usar un lenguaje positivo puede transformar nuestras vidas, porque nos ayuda a mejorar la forma en que nos comunicamos, las relaciones que tenemos con los demás. A su vez, también influye en gran medida en la forma en la que vemos el mundo: de hecho, tiene el potencial, de cambiar nuestro estado de ánimo.

¿Qué es el lenguaje positivo?

El lenguaje positivo es una forma de comunicación que utiliza expresiones optimistas, constructivas y motivadoras para transmitir confianza y claridad. A diferencia del lenguaje negativo, que puede condicionarnos limitando acciones o centrando la atención en errores, el lenguaje positivo ofrece alternativas y enfocarse en lo que sí se puede lograr. Esto no significa ignorar los problemas, sino abordarlos con una actitud proactiva y respetuosa.

Diversas investigaciones destacan que este tipo de comunicación mejora el bienestar emocional, promueve un estado mental más optimista y fortalece las relaciones interpersonales . Además, en entornos laborales, el uso de un lenguaje afirmativo y empático incrementa la motivación, la productividad y facilita la resolución de conflictos.

En el ámbito educativo y familiar, el lenguaje positivo también refuerza la autoestima y fomenta un ambiente de confianza y crecimiento emocional . Por ejemplo, decir “Puedes mejorar esto agregando…” en lugar de “No está bien hecho” proporciona dirección y empoderamiento, en lugar de frustración.

¿Qué beneficios tiene utilizar un lenguaje positivo?

El lenguaje positivo evita:

EXPRESIONES NEGATIVAS

EXPRESIONES DE DUDA

VOCABULARIO LIGADO AL MIEDO

EXPRESIONES DE OPOSICIÓN

Al utilizar un lenguaje positivo y una actitud optimista, las personas tienden a tener una mejor percepción de sí mismas, una mayor motivación y una visión mucho mejor de la vida. Esto tendrá un impacto beneficioso directo en su estado de ánimo y bienestar general.

como-tener-un-lenguaje-positivo

Asertividad e Inteligencia Emocional

Asertividad

La asertividad es una habilidad comunicativa que permite expresar opiniones, necesidades y emociones de forma honesta, clara y respetuosa, sin agredir ni someterse a los demás. Esta competencia es fundamental para mantener relaciones personales y profesionales saludables, ya que fomenta la confianza y el respeto mutuo. Ser asertivo implica defender nuestros derechos sin transgredir los ajenos, y saber decir “no” sin culpa ni agresividad, lo cual es clave en la gestión de límites y conflictos.

Inteligencia emocional

Por su parte, la inteligencia emocional es la capacidad de reconocer, comprender y gestionar nuestras emociones y las de los demás. Una persona emocionalmente inteligente puede identificar lo que siente, regular sus impulsos y responder adecuadamente ante situaciones de estrés o tensión. Al integrarse con la asertividad, se convierte en una herramienta poderosa para comunicar de forma empática, construir vínculos sólidos y manejar desacuerdos sin perder el control. En conjunto, ambas habilidades son esenciales para una vida equilibrada, tanto en lo personal como en lo laboral.

Ejemplos prácticos adaptados a distintos contextos

“Tu respuesta está mal.”                                                               

“Siempre llegas tarde.”                                            

“No sabes hacer las cosas solo.”                                              

“Estoy cansado de cometer errores.”

“Vas por buen camino, revisa este punto y mejorarás aún más.”

“Tu puntualidad es importante para el equipo, ¿cómo podemos ayudarte a mejorarla?”

“Confío en que con un poco de práctica lo harás excelente.”

“Cada error es una oportunidad de aprendizaje que te acerca más a tu meta.”

Reformular oraciones, centrarnos en lo que sí se puede, sugerir alternativas, utilizar un vocabulario empático, amable y apreciativo. También, prestar atención a nuestro lenguaje corporal (gestos, posturas, sonrisa, mirada…), manteniendo un estado relajado en la intercomunicación.

Estos, son ejemplos y pasos a seguir para incorporar en nosotros, en nuestro día a día, el lenguaje positivo, que no es otra cosa que la práctica, en una de sus distintas facetas, de la Inteligencia Emocional.

Administrator